DESARROLLAR EL PENSAMIENTO CRÍTICO, por Marcial Perez
El pensamiento crítico, esa capacidad de analizar y evaluar la consistencia de los razonamientos, en especial aquellas afirmaciones que la sociedad acepta como verdaderas en el contexto de la vida cotidiana, puede entrenarse.
La propuesta consiste en modificar la enseñanza de tal manera que se induzca al aprendiz a tomar decisiones en base al entendimiento de la validez y alcance de las herramientas que usa como apoyo en su razonamiento.
Las instrucciones que se dan en el método tradicional de enseñanza y el orientado al desarrollo del pensamiento crítico difieren. El método tradicional se limita al uso de los modelos físicos y matemáticos como si se tratase de una receta de cocina. Para el pensamiento crítico, dichos modelos deben conocerse en detalle y ser cuestionados a la hora de darles uso en una aplicación práctica.
El cerebro no retiene un gran volumen de datos que se imparten en un tiempo acotado, por el contrario, decide con qué ha de quedarse para recordar.
Por esta razón es que debemos jerarquizar y priorizar los contenidos y lo que deseamos construir en el cerebro del que aprende. Y qué mejor que hacerlo a favor del entrenamiento en pensar críticamente la manera en que se nos presenta la vida.